Este 10 de agosto, tras 15 meses, se reanudaron las entregas de los Boeing 787 Dreamliner con la transferencia en Charleston (CHS), Carolina del Sur, de una aeronave para American Airlines.

El modelo, con registro N880BJ, salió de la línea de producción en abril de 2021, y desde ese entonces solo ha realizado algunos vuelos de pruebas, habiendo quedado almacenado desde junio del año pasado.

En aquel momento se detectaron discordancias en el fuselaje del avión, y muchas unidades tuvieron que volver a la fábrica para ser reparadas, y después de los accidentes del 737 MAX, la FAA exigió a Boeing que garantice el máximo nivel de calidad en la producción de los aviones, por lo que había ordenado la suspensión de las entregas, pero no de la producción en sí, hasta que se mejore el nivel de inspección y calidad.

«Este es un día emocionante para American Airlines, ya que recibimos nuestro primer Boeing 787-8 desde abril de 2021. El 787 es una parte importante de la flota de American y este es el primero de los nueve 787 que esperamos recibir este año», dijo Robert Isom, CEO y CRO de American Airlines.

Actualmente, American tiene activos en su flota 47 aviones de la familia 787 con 42 pedidos adicionales.

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American Airlines era una de las empresas más perjudicadas por la suspensión de las entregas, e incluso tuvo que rever su programación de larga distancia de este verano boreal, dado que originalmente esperaba contar con trece 787 en su flota.

Otras aerolíneas que han demorado su itinerario ante dichos retrasos son Qatar Airways (9), Lufthansa (5), Air Europa (7), British Airways (6), Vistara (3), Aeroméxico (3), LATAM (5) y otras 20 compañías más, incluidos los primeros Dreamliner de Hawaiian y MIAT Mongolian Airlines.

A fines de julio, Boeing fue finalmente autorizada a reanudar la entrega de los aviones 787 Dreamliner, asegurando que «Boeing realizó todos los cambios necesarios para garantizar que el 787 Dreamliner cumple los estándares de certificación» aunque, como se había adelantado, también manifestaron que cada aeronave será inspeccionada por la FAA previo a la obtención de su certificado de aeronavegabilidad, reafirmando así la decisión tomada en febrero de este año de retirarle a Boeing la facultad de certificar sus aviones.

En la presentación de los resultados financieros del segundo trimestre de 2022 que tuvo lugar a fines de julio, Brian West, Chief Financial Officer de Boeing, dijo que tienen 120 aeronaves 787 en inventario y que estaban realizando las tareas necesarias para prepararlas para su entrega.

Desde su entrada en servicio en 2011, se han entregado 1.006 Boeing 787 de un total de 1.482 aeronaves pedidas.