En el marco del proceso de protección de bancarrota iniciado a fines de 2019, South African Airways anunció hoy una serie de medidas que buscan devolverle rentabilidad a sus operaciones.

El mismo está a cargo de dos consultoras especializadas en esas prácticas, lideradas por Siviwe Dongwana y Les Matuson, quienes han venido trabajando con directivos de la empresa, acreedores, autoridades gubernamentales y expertos de la industria en desarrollar un programa de reestructuración que, según informaron a través de un comunicado, se presentará a fines de febrero para su aprobación por parte de los acreedores. 

Pero mientras tanto la aerolínea estatal decidió avanzar en medidas urgentes que mantengan la caja en orden.

Éstas abarcan la cancelación de sus vuelos desde Johannesburgo hacia Abidjan via Accra, Entebbe, Guangzhou, Hong Kong, Luanda, Munich, Ndola, y San Pablo a partir del próximo 29 de febrero.

La red doméstica se reducirá al mínimo desde la misma fecha, quedando sólo la ruta que une Johannesburgo y Ciudad del Cabo (se levantan Durban, East London y Pt. Elizabeth). Esto no afectará a los vuelos operados por su filial low-cost Mango.

Los destinos intercontinentales que permanecerán en pie son Frankfurt, Londres/Heathrow, Nueva York, Perth y Washington, mientras que los interafricanos que siguen son Blantyre, Dar es Salaam, Harare, Kinshasa, Lagos, Lilongwe, Lusaka, Maputo, Mauritius, Nairobi, Victoria Falls, Livingston y Windhoek.

«Estas medidas le darán fortaleza al negocio de SAA. Creemos que dará seguridad a nuestros clientes más leales acerca de que nos estamos dirigiendo en la dirección correcta. Estamos enfocados en nuestro objetivo de recuperar la salud comercial de SAA y crear una aerolínea de la cual los sudafricanos puedan estar orgullosos», comentaron.

En relación a las potenciales pérdidas de puestos de trabajo, expresaron que «es nuestra intención reestructurar la empresa de manera tal que podamos retener tantos empleos como sea posible. Eso nos ayudará a crear una plataforma hacia un futuro sustentable. Pero desafortunadamente será necesaria una reducción en el número de empleados».

Tampoco se descarta la venta de diferentes activos como aeronaves (su flota A340) y subsidiarias para mejorar la liquidez de la aerolínea.

La flota de South African Airways se compone actualmente de 7 A319, 10 A320, 6 A330-200, 5 A330-300, 7 A340-300, 8 A340-600 y 4 A350-900.

2011 fue el último año en el que SAA obtuvo ganancias, y desde 1994 ha recibido rescates financieros por un valor de USD 3,8 mil millones. El año pasado el Tesoro Nacional rechazó seguir proveyendo de más fondos a la aerolínea, cuyas finanzas recibieron un duro golpe tras la huelga de ocho días que tuvo lugar a fines de noviembre. 

South African Airways supo ser el grupo aéreo más importante del continente africano, pero llegó a esta situación tras años de desmanejos provocados principalmente por la intromisión del poder político en su administración.