Boeing pronosticó que perderá una enorme cantidad de dinero en el primer trimestre debido al intenso escrutinio regulatorio y a la caída de producción del 737 MAX tras el accidente de Alaska Airlines ocurrido en enero. Asimismo, los principales directivos de aerolíneas de EE.UU. solicitaron una reunión con la gerencia de Boeing para expresar sus preocupaciones respecto a la demora en la entrega de aviones.

Según Brian West, Director Financiero de Boeing, el desembolso de dinero será de hasta 4.500 millones de dólares. «No podemos garantizar la estabilidad financiera a corto plazo«, dijo West. Además, señaló que desde el 1 de marzo, Boeing dejó de aceptar fuselajes de Spirit AeroSystems con faltante de piezas o que requieran reparaciones.

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La desaceleración de las entregas del fabricante comienza a sentirse entre las aerolíneas. El CEO de Ryanair, Michael O’Leary, dijo que la capacidad de verano en Europa se verá impactada por los retrasos. O’Leary dijo que se reuniría con enviados de Boeing.

En igual sentido se expidieron los principales ejecutivos de las aerolíneas de EE.UU., que solicitaron una reunión con la directiva de Boeing para expresar sus preocupaciones sobre los problemas. De acuerdo a lo reportado, los directivos de las aerolíneas quieren que el gigante aeronáuitco detalle el plan a seguir. Larry Kellner, presidente de Boeing, encabezará la reunión, que podría concertarse la semana que viene.

En medio de tanta incertidumbre, Boeing está explorando opciones para volver a incorporar a Spirit AeroSystems como parte vertical de la empresa. La adquisición de Spirit otorgaría a Boeing un mayor control sobre su producción. Sin embargo, un problema a vencer es la participación que Spirit tiene en la cadena de suministro de Airbus.

El fabricante estadounidense estaría considerando deshacerse o reorientar aquellos negocios específicos responsables de suministrar componentes a Airbus. Esto se produce como estrategia defensiva ante posibles observaciones que los reguladores europeos realicen sobre el negocio ante la dependencia de Airbus para el suministro de piezas clave.