La situación alrededor de Conviasa, su filial de carga Emtrasur y los aviones que incorporó este año y que eran propiedad de la compañía iraní Mahan Air tuvo un nuevo y complejo episodio en la noche del miércoles.

Boliviana de Aviación decidió cancelar los tramos que había previamente acordado realizar entre Santa Cruz de la Sierra y Buenos Aires para completar el viaje que inició el Airbus A340-600 que incorporó la empresa estatal de aviación venezolana hace sólo algunos días.

En el aeropuerto internacional de Santa Cruz de la Sierra, personal de la compañía boliviana informó a los pasajeros de Conviasa que se cancelaba la operación del vuelo OB 9708 a Buenos Aires.

De acuerdo con el medio venezolano Monitoreamos, las autoridades de BoA indicaron que las autoridades argentinas habían «negado el permiso de operación» y los pasajeros que habían salido de Caracas deberían volver a la ciudad de origen.

En Buenos Aires, Boliviana de Aviación canceló el vuelo OB 9709 y de acuerdo con reportes desde la terminal, trasladó a los pasajeros afectados -alrededor de 140- a hoteles cercanos a la espera de una resolución de la situación.

A las 10:00 de la mañana del miércoles 15 de junio el Airbus A340-642 con matrícula YV3535 y bautizado “General en Jefe Rafael Urdaneta” despegó de Caracas para llegar hasta el aeropuerto de Viru Viru.

Allí arribó en la tarde y esperaba que se complete la operación especial de la compañía boliviana que le permitiría trasladar viajeros hasta Ezeiza y embarcar pasajeros provenientes de Buenos Aires para regresar luego a la capital venezolana.

Fuentes cercanas a la operación comentaron que la posibilidad de sanciones del Departamento del Tesoro estadounidense por el soporte de operaciones a compañías incluidas en la lista de la OFAC (Office of Foreign Assets Control) provocaron una reevaluación del riesgo y forzaron la cancelación de la operación.

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